Síntomas en el primer trimestre de embarazo
Náuseas y vómitos
Más allá de la falta de menstruación, no todas las embarazadas presentan los mismos síntomas de embarazo. Que no tengas ningún otro síntoma no implica un mal pronóstico. Los más típicos son las náuseas y los vómitos que presentan entre un 50% y un 80% de las mujeres embarazadas. Son más frecuentes por la mañana, pero en algunas mujeres se presentan también durante el día.
En general, comer alimentos pastosos (bastoncitos, biscotes, galletas) en pocas cantidades y cada 2-3 horas ayuda a mitigar las náuseas. En cambio, los alimentos más líquidos y los alimentos calientes suelen aumentar la sensación de náusea, así que te recomendamos tomar alimentos fríos o a temperatura ambiente. También te sentirás mejor si aumentas el consumo de proteína. En cambio, intenta evitar los olores intensos e ingerir comida de sabores picantes, grasas y fritos.
Habitualmente, los vómitos desaparecen al final del primer trimestre. Si persisten o no remiten con estos consejos, deberías consultarnos para que podamos darte tratamiento médico, en caso que fuera necesario.
Dolor abdominal
Es frecuente que al principio del embarazo sientas dolor abdominal. Suele referirse como un dolor premenstrual, como si tuviera que venirte la regla. Se debe al crecimiento de la matriz y es algo completamente normal. Si va acompañado de pérdidas de sangre o notas un dolor más fuerte que el de una regla habitual, es mejor que nos contactes. Si es de noche o fin de semana, acude al servicio de urgencias.
Estreñimiento
Algunas mujeres notan más dificultad para ir al baño durante el embarazo. Se debe a la progesterona, que ralentiza el movimiento abdominal. Además, a medida que el útero crece, comprime cada vez más los intestinos, dificultando así su función.
Para paliar este síntoma debes seguir una dieta rica en fibra, con mucha fruta y verdura, cereales y legumbres; también ayuda hacer ejercicio y beber mucha agua. Mantener una rutina horaria para ir al baño también ayuda a mitigar los síntomas. Si con estos consejos no notas una mejora, puedes tomarte un sobre de fibra de farmacia o usar un supositorio de glicerina, que son inocuos para el feto.
Cambio en los pechos
El aumento de volumen mamario y de sensación de tensión mamaria se inician muy pronto en el embarazo. Durante la gestación, crecen las aureolas y los pezones y se vuelven más oscuros. También aumenta el tamaño de las glándulas de las aureolas y a veces puede parecer que han salido pequeñas verrugas. No suponen ningún problema ni se tienen que extirpar.
El aumento de volumen puede implicar la aparición de estrías. Por eso te recomendamos que desde el principio de la gestación uses cremas antiestrías o muy hidratantes.
Para prepararse de cara a la lactancia, el flujo sanguíneo en las mamas aumenta. Eso hace que crezca el tamaño de las venas y por eso son mucho más visibles a simple vista a través de la piel.
Aumento de las ganas de orinar
Es normal que durante el embarazo orines con más frecuencia, incluso desde el primer trimestre. Eso se debe a que el aumento de flujo sanguíneo hacia los riñones provoca una mayor producción de orina. Además, el volumen del útero crece y presiona la vejiga, lo que provoca que tengas más sensación de necesitar ir al baño.
Si tienes molestias al orinar, como ardor o dolor, ponte en contacto con nosotros por si fuera necesaria la indicación de un tratamiento antibiótico.
Signos de alarma durante el primer trimestre
Si tienes cualquier pregunta, hazla sin complejos durante las visitas médicas. Allí es donde debes resolver tus dudas, por muy obvias que te parezcan.
Ciertas situaciones requieren más urgencia en la visita:
• Sangrado. Si presentas pérdidas de sangre por la vagina, debes contactarnos inmediatamente o acudir a urgencias si te pasa en horario nocturno o durante el fin de semana. El sangrado es un signo de alarma que cualquier momento del embarazo, aunque puede que después de una exploración vaginal presentes un sangrado leve que carezca de importancia.
• Dolor abdominal más fuerte que el de una regla. Es normal sentir un dolor parecido al de la regla, debido a la distensión del útero; pero si el dolor va en aumento y es más agudo que el dolor menstrual, ponte en contacto con nosotros o acude al servicio de urgencias del hospital.
CONSEJOS DURANTE EL EMBARAZO
Ejercicio físico
Puedes hacer deporte durante el embarazo, siempre que no te indiquemos lo contrario. Opta por un deporte suave, que excluya un impacto excesivo y que no implique demasiado riesgo de caídas. Recomendamos hacer piscina, yoga, pilates, bicicleta estática, elíptica… y desaconsejamos steps, aeróbic y todos los deportes de contacto.
Viajes
En principio puedes viajar durante el embarazo, pero siempre es mejor que nos lo consultes antes. Te recomendamos que no vueles hasta que hayas hecho al menos una primera ecografía y hayas comprobado que todo se desarrolla correctamente. Cuando viajes, es importante tener en cuenta el destino y conocer los recursos sanitarios locales, por si tuvieras alguna urgencia. Durante el vuelo es importante que te levantes cada 1-2 horas y te muevas un poco para estimular la circulación sanguínea de las piernas. Si estás en el segundo o tercer trimestre de embarazo, te recomendamos que uses medias de compresión para mejorar la circulación. El último mes no es recomendable viajar en avión, debido al riesgo de ponerte de parto durante el vuelo o en el lugar de destino. Infórmate de si la compañía aérea con la que realizarás el vuelo necesita que presentes un informe médico para poder embarcar.
En los viajes en coche aconsejamos que hagas un descanso cada 2-2,5 horas para ir al baño, caminar un poco y estimular la circulación de las piernas. La moto está contraindicada, debido al riesgo de caídas.
Medicación
Durante el embarazo es mejor que nos consultes antes de tomar cualquier medicación. Es muy importante no automedicarse, pero de todas formas te damos algunas pautas: para el dolor o bien en un episodio de fiebre, solo puedes tomar paracetamol (en caso de que no seas alérgica). Los antiinflamatorios tipo ibuprofeno y aspirina están contraindicados en casi todos los casos.
Los antibióticos que pueden administrarse con más seguridad durante el embarazo son las penicilinas (amoxicilina, ampicilina…). En caso de alergia a la penicilina lo mejor es que nos consultes antes de tomar otro antibiótico.
Trabajo
La mayoría de empleos no comportan ningún riesgo para el embarazo, así que puedes trabajar con normalidad hasta muy avanzada la gestación. Para estar más segura, en el servicio de prevención de riesgos laborales de tu empresa te informarán sobre tu caso concreto.
DIETA Y EMBARAZO
Recuerda: durante el embarazo no tienes que comer por dos, sino cubrir tus necesidades y las del feto. No todas las mujeres han de aumentar los mismos quilos durante el embarazo: las que tienen un peso por encima del deseado deberían aumentar como mucho 7-8 quilos durante toda la gestación; las que tienen un peso bajo antes de la gestación deberían aumentar entre 10 y 12 quilos. Este aumento de peso se debería de repartir de la siguiente manera:
1. En el primer trimestre se debería de aumentar poco, alrededor de 1,5 quilos. Algunas mujeres incluso bajan de peso debido al malestar y las náuseas, sin que eso implique ningún riesgo para el feto.
2. En el segundo trimestre, el aumento debería de ser de entre 3,5 y 5 quilos.
3. En el tercer trimestre se recomienda un aumento de entre 5 y 6 quilos.
El aumento excesivo de peso durante el embarazo puede ser peligroso para la madre gestante y también para el feto, ya que aumenta el riesgo de diabetes gestacional, hipertensión y preeclamsia, y aumenta la posibilidad de una cesárea en el momento del parto.
Durante el embarazo es importante seguir una dieta sana y equilibrada y aumentar la ingesta de hierro, vitaminas A, B y C, yodo y ácido fólico. Las pacientes que siguen dietas especiales, como las vegetarianas o veganas, deberían consultar un nutricionista para adaptar su dieta al nuevo estado. Como norma general se recomienda:
• Beber entre 0,5-1 litro de leche/productos lácteos al día. Os recomendamos los desnatados para controlar el peso.
• Comer vegetales 2-3 veces al día y fruta 1-2 piezas al día.
• Una ración de carne/pollo/pescado al día.
Evita las salsas muy fuertes, las especias y los picantes y no te excedas con los fritos.
Recomendamos comer cinco veces al día, sin ingerir grandes cantidades cada vez.
Puedes tomar café y té, pero con moderación (una o dos tazas al día). Pero el alcohol está totalmente contraindicado.
Grasas: Son necesarias para la formación de las nuevas células del feto, por lo que deben incluirse en la dieta. Pero recuerda que hay grasas más saludables que otras. Debes comer grasas de origen vegetal (aceite de oliva, por ejemplo) y las que provienen del pescado, pero debes evitar las grasas de los alimentos procesados y los fritos.
Cereales: Son fuente de vitamina B, incluyendo el ácido fólico, y además contienen nutrientes como el hierro, el selenio y el magnesio. Si aumentas el consumo de cereales integrales, además, obtendrás una buena fuente de fibra que te ayudará a prevenir el estreñimiento.
Fruta: La fruta aporta diferentes vitaminas y fibra. Algunas frutas, como el plátano o la uva, son además muy calóricas, y por eso es mejor limitar su ingesta en caso de que estés aumentando demasiado de peso. Es muy importante que laves y peles bien toda la fruta.
Verduras y hortalizas: Son fuente de vitaminas importantes, como la vitamina A y los folatos. Además, aportan pocas calorías y mucha fibra. Hace falta lavarlas bien antes de consumirlas crudas.
Alimentos proteicos: Las proteínas son básicas para construir nuevos tejidos. Las encontramos en las carnes, aves, pescados, legumbres, huevos, frutos secos… En estos alimentos encontramos, además, otros nutrientes, como hierro y zinc (en la carne), fibra y minerales (en las legumbres), grasas (en los huevos) y calcio (en los frutos secos).
La carne y el pescado deben estar bien cocinados, a no ser que se hayan congelado antes durante al menos 24 horas.
Es mejor limitar la ingesta de carne roja, lo que no quiere decir evitarla completamente, y combinarla con carne blanca como el pollo, el pavo y el conejo.
Recomendamos la ingesta de pescado al menos tres veces a la semana, y que una de ellas sea pescado azul (sardina, caballa, salmón…), ya que los ácidos grasos omega 3 que contienen se han relacionado con una mejor maduración del sistema nervioso central. Intenta evitar el pescado de gran tamaño (atún rojo, pez espada, emperador) por su alto contenido en mercurio, tóxico para el cerebro en formación del feto.
Lácteos: la leche de origen animal tiene un alto contenido en proteínas, grasas y calcio. Es necesario que la leche esté pasteurizada y se recomienda la semidesnatada o desnatada en mujeres con un aumento de peso excesivo.
TOXOPLASMOSIS
La toxoplasmosis es una infección habitualmente benigna para los adultos, pero que si afecta a la mujer embarazada puede ser peligrosa para el feto. Se produce por la infección de un parásito que se transmite a través de las heces de gato, la carne cruda o el uso de utensilios de cocina contaminados por haber estado en contacto con alimentos crudos. También a través de fruta y verdura que hayan estado en contacto con tierra contaminada.
Al principio del embarazo comprobaremos con una analítica si has pasado la infección con anterioridad, es decir, si ya tienes anticuerpos que protejan al feto durante toda la gestación. En ese caso, no te hará falta tomar las precauciones que exponemos a continuación. En caso de no haberla pasado, deberás seguir estos consejos:
• Cocina bien la carne y, si tienes dudas, congélala al menos 24 horas antes de cocinarla.
• Evita la carne cruda como el steak tartar o el carpaccio, así como los embutidos de carne cruda, como el jamón serrano. En caso de que los embutidos estén ya cocinados o estén en una pizza, por ejemplo, puedes consumirlos sin problema, porque ya han estados calentados previamente.
• Evita los huevos crudos y lava bien la verdura y la fruta antes de comerla.
• Sobre todo, no olvides limpiar bien la encimera y los utensilios de cocina después de que hayan estado en contacto con alimentos crudos. Lávate bien las manos después de preparar la comida.
• Usa guantes si realizas trabajos de jardinería y lávate bien las manos cuando acabes.
• No cambies la arena de los gatos, ya que puedes contagiarte de toxoplasmosis a través de sus heces.
LISTERIA
La listeria es una rara enfermedad bacteriana, aunque últimamente su incidencia está aumentando. Puede conllevar consecuencias graves para el feto y, aunque el riesgo de contraerla es bajo, se deben seguir unas recomendaciones para prevenir el contagio:
• Bebe solo leche pasteurizada y evita los quesos blandos hechos de leche no pasteurizada (por ejemplo, evita el queso brie o camembert de leche cruda).
• Evita las salchichas y carnes procesadas no cocinadas.
• Evita los patés frescos (aunque el riesgo con los enlatados es casi nulo).
• Evita los mariscos refrigerados y los pescados ahumados.
El diagnóstico prenatal es un campo con grandes avances en los últimos años y no todos bien conocidos.
Existen 3 grandes grupos de pruebas:
1. El triple screening
2. Las pruebas invasivas
3. El test prenatal no invasivo
Ninguna es la prueba ideal y todas tienen sus ventajas y desventajas.
1. Triple screening:
El triple screening es la prueba clásica. Para calcular su resultado se utilizan 3 parámetros:
- La edad
- Parámetros hormonales detectados en sangre
- Datos de la ecografía de las 12 semanas (pliegue nucal…)
Combinando estos 3 parámetros se consigue un resultado en forma de fracción. Si el riesgo es mayor a 1/250, por ejemplo 1/100 i 1/50 se recomienda hacer más estudios. Si el riesgo es menor a 1/250, por ejemplo 1/500 i 1/2000 no se recomienda realizar una prueba invasiva. Siempre debe entenderse que un riesgo bajo no es la seguridad de que el feto no esté afecto de síndrome de Down sino que el riesgo de que esté afecto es bajo. Si el riesgo es de 1/1000 quiere decir que hay una posibilidad entre 1000 de que el feto esté afecto.
Si el riesgo es alto está indicado hacer más estudios para descartar con seguridad que el feto tenga alguna alteración.
Para calcular el triple screening realizaremos una extracción de sangre entre las 9 y las 12 semanas en el laboratorio de análisis habitual. A las 12-13 semanas se realiza una ecografía y medimos, entre otros parámetros, el pliegue nucal. Se te entregará un informe con estos datos que deberás hacer llegar al laboratorio. Así calcularán el índice de riesgo individualizado para cada paciente en aquel embarazo.
Esta prueba detecta el 85-90% de los fetos con síndrome de Down, es decir, entre las mujeres embarazadas con un feto con síndrome de Down en un 85-90% de los casos el triple screening nos dará un resultado de alto riesgo pero en un 10-15% nos dará un resultado de bajo riesgo.
La gran ventaja de esta prueba es que no tiene riesgo para el feto ni para la madre y que es barata (incluida en la mayoría de aseguradoras médicas).
2. Pruebas invasivas
Las pruebas invasivas son aquellas en las que entramos dentro de la cavidad uterina. Son 2: la biopsia corial y la amniocentesis. Al tener que entrar dentro de una cavidad estéril el riesgo de pérdida fetal es de un 1% aproximadamente.
La biopsia corial es una prueba que se realiza sobre las 11-13 semanas de embarazo. Se extrae una muestra de la placenta embrionaria (o corion) por vía vaginal o bien por vía abdominal. Se realiza un cultivo de la muestra y se estudian los cromosomas presentes. Con ello podemos ver si en la placenta los cromosomas son normales o no. Un 1% de todas las biopsias coriales dan un resultado no concluyente y entonces debe hacerse una amniocentesis para confirmar el resultado.
La amniocentesis es una prueba que se realiza a las 16 semanas. Con una punción guiada por ecografía se obtiene una muestra de líquido amniótico que se envía a analizar. Hay 2 tipos de resultados: el rápido que está en 2-3 días, que no suele entrar en las aseguradoras médicas, y mira sólo 5 cromosomas, el 13, 18, 21 y el X y el Y (los sexuales) Son los 5 que suelen alterarse más frecuentemente. Con este resultado sabemos con una alta seguridad si alguno de éstos está alterado. El resto de los cromosomas se comprueban con el resultado estándar que tarda entre 3 y 4 semanas.
Tanto la amniocentesis como la biopsia corial, al ser pruebas invasivas, tienen un riesgo de pérdida fetal que se estima sobre un 1%.
3. Test prenatal no invasivo
Son las pruebas más nuevas. Se realizan en sangre materna y por tanto no tienen riesgo para el embarazo. Estas pruebas analizan ADN placentario en sangre materna. En algunos casos el resultado puede ser no informativo porque no se detecte suficiente ADN fetal en la muestra de sangre materna.
Existen 3 pruebas no invasivas según el número de cromosomas y de alteraciones genéticas que estudian. Si quieres más información sobre ellas pregunta en tu visita médica y te aconsejaremos. Estas pruebas no suelen estar cubiertas por las aseguradoras a no ser que se tenga un triple screening de alto riesgo, por lo que recomendamos primero tener el resultado del triple screening antes de solicitar una de ellas.
Si la prueba nos da un resultado de normalidad (se expresa como bajo riesgo) el índice de fiabilidad es mayor al 99,8%. En caso de tener un resultado positivo debe confirmarse siempre con una prueba invasiva ya que en un 1% de casos se trata de un falso positivo de la prueba.
Síntomas en segundo trimestre de embarazo
Durante el segundo trimestre suelen desaparecer las náuseas y vómitos. El volumen de la barriga todavía no es muy grande, cosa que permite seguir las actividades de forma habitual. De todas formas aparecen otros síntomas.
Acidez o ardor de estómago:
A finales del segundo trimestre suele aparecer la acidez de estómago. La presión del útero sobre el estómago facilita que el ácido del estómago suba hacia el esófago. Para evitarlo es mejor que esperes un par de horas para tumbarte después de comer. Los alimentos más picantes o ácidos como los cítricos, el chocolate y el café y el té favorecen también la aparición de la acidez.
Si no mejoras con estos consejos se puede probar con Almax o Gaviscon después de las comidas.
Dolor abdominal:
El dolor abdominal cambia en el segundo trimestre: suele estar situado más alto en la barriga debido a que se estiran los ligamentos que sujetan la matriz. Si el dolor recuerda al dolor de regla y aparece en intervalos regulares coincidiendo con endurecimiento de la parte inferior del abdomen deberías contactarnos para descartar que no fueran contracciones prematuras.
Si el dolor no es rítmico, se trata de las denominadas contracciones de Braxton Hicks, benignas y reactivas al movimiento de la madre y más frecuentes por la tarde noche.
Cambios en la piel
La piel cambia mucho durante el embarazo. Frecuentemente se nota picor en la barriga o las mamas debido a su estiramiento. Para aliviarlo deberías hidratar bien la piel con crema y poner alguna crema antiestrías para evitar la posibilidad de que aparezcan.
Además puedes notar que salen más manchas en la piel. Para combatirlas recomendamos un factor de protección alto, sobre todo en la cara. Si vas a la playa o piscina la piel está más sensible al sol por lo que también se recomienda un factor de protección alto.
Diabetes gestacional
Sobre la semana 24 de embarazo se te realizará el test de O’Sullivan. En caso de salir un resultado por encima de 140 mg/dl deberás hacer una dieta especial para realizar la curva de glucosa de 3 horas (curva larga). Si el resultado de esta curva está alterado se diagnostica una diabetes gestacional y tendrás que acudir a un endocrinólogo para un buen control del azúcar.
El endocrinólogo pautará una dieta para evitar las subidas de azúcar de la diabetes que pueden ser perjudiciales para el feto y alterar su crecimiento. La dieta se adecuará a cada mujer, pero a grandes rasgos deben evitarse los azúcares de absorción rápida (como el chocolate, azúcar, caramelos, helados, tartas …) pero mantendrá la ingesta azúcares de absorción lenta como el pan, pastas, arroz, patata y legumbres. Para evitar las subidas de azúcar después de las comidas te recomendamos que no te sientes después de comer sino que andes para quemar el azúcar ingerido. Es muy importante hacer la dieta tal y como se te paute.
Signos de alarma durante el segundo trimestre:
Si tienes cualquier pregunta, hazla sin complejos durante las visitas médicas. Allí es donde debes resolver tus dudas, por muy obvias que te parezcan.
Ciertas situaciones requieren más urgencia en la visita:
- Contracciones: Las contracciones que se pueden notar durante el segundo trimestre suelen ser irregulares y no deben hacerse dolorosas. Si parecen más frecuentes o dolorosas de lo habitual lo mejor es, primero de todo, relajarse un rato y descansar. Si a pesar de eso siguen siendo molestas contáctanos en la consulta. SI es en horario nocturno o fin de semana acude al servicio de urgencias del hospital.
- Sangrado: No es normal tener un sangrado en segundo trimestre. Si apareciera siempre debe hacerse una valoración médica en consulta o bien en urgencias. Contáctanos si tienes cualquier sangrado en segundo trimestre.
Vacunas:
Durante el embarazo hay tres vacunas recomendadas básicamente:
Vacuna de la tosferina
La tos ferina es una enfermedad respiratoria muy contagiosa, producida por la bacteria Bordetella Pertussis. En recién nacidos esta enfermedad puede ser grave. Los últimos años y por diversas razones están aumentando los casos de tos ferina y los bebés están más expuestos a contraerla. En los recién nacidos esta enfermedad precisa de ingreso hospitalario en un 70% de casos y en algunas ocasiones ingreso en la unidad de cuidados intensivos infantiles.
Por ello, desde 2014, la Agencia de Salud Pública de Catalunya recomienda vacunar a las embarazadas. La vacuna de la tos ferina, llamada dTpa, confiere además inmunidad contra el tétanos y la difteria. Es una vacuna inactivada y altamente segura tanto para la madre como para el feto.
Con la vacuna las embarazadas producen anticuerpos contra la tos ferina, los cuales pasarán a través de la placenta y llegarán al feto por el cordón umbilical; y por tanto protegen al bebé como si estuviera vacunado hasta que se les administra a ellos la primera dosis de esta vacuna a los dos meses de vida. Esta inmunidad dura entre 4 y 12 años, así que protegerá también a la madre en el postparto y evitará la principal causa de contagio en neonatos: el contacto con las personas más cercanas, siendo la madre la fuente de contagio en la mitad de los casos. De todas formas, se recomienda una nueva vacunación a las mujeres en cada embarazo, ya que el paso máximo de anticuerpos de la madre al feto se produce las primeras semanas post vacunación.
Vacuna de la gripe:
Se recomienda que todas las embarazadas se vacunen contra esta enfermedad vírica a partir del segundo trimestre. Una gripe puede tener poca importancia en una mujer sana y joven, pero en las mujeres embarazadas tiene una probabilidad mucho mayor de complicarse con una neumonía.
La vacuna de la gripe es inactivada por lo que es segura durante el embarazo tanto para la madre como para el feto, y es la forma más eficaz de prevenir la enfermedad.
Gammaglobulina antiD
Popularmente se le la conoce como la vacuna del Rh. En caso de estar embarazadas de un feto con sangre de grupo sanguíneo positivo, las mujeres con grupo sanguíneo negativo producirán anticuerpos contra la sangre del feto. Por tanto producirán una anemia en el feto. La vacuna evita la fabricación de estos anticuerpos de forma que la madre no ataque a la sangre fetal. La gammaglobulina se administra generalmente entre la semana 28 y 29 de embarazo. En caso de realizarse algún procedimiento invasivo (amniocentesis o biopsia corial) en mujeres Rh negativas también debe administrarse la vacuna, independientemente del grupo sanguíneo del feto.
Cuando nace el bebé, comprobaremos su grupo sanguíneo y, en caso de ser positivo, deberá administrarse una nueva dosis de gammaglobulina a la madre en las primeras 48 horas postparto.
Síntomas en el tercer trimestre de embarazo
Durante el tercer trimestre crecen las molestias abdominales debido al volumen y el peso de la barriga.
Aumento de las ganas de orinar
El crecimiento del feto comprime la vejiga, cosa que comporta más ganas de orinar. Eso va unido a un aumento de la producción de orina durante el embarazo. Si sientes ardor o dolor al orinar, háznoslo saber y así descartaremos una posible infección.
Secreción vaginal
Durante todo el embarazo aumenta la cantidad de flujo vaginal, ya que es una forma fisiológica de defensa ante las posibles infecciones. Suele ser un flujo blanquecino y algo líquido, pero si ves que se vuelve espeso y te produce picor, deberíamos descartar alguna infección, como por ejemplo las cándidas.
Contracciones de Braxton Hicks
Notarás las contracciones de Braxton Hicks durante el tercer trimestre y poco antes de ponerte de parto. No son demasiado dolorosas y, sobre todo, son irregulares. Si se hacen más frecuentes, estírate un rato y descansa. En caso de que en reposo las contracciones persistan, contacta con la consulta.
Dolor de espalda
Es frecuente sentir dolor de espalda durante el tercer trimestre, debido a la posición más arqueada de las lumbares. Para aliviarlo, descansa, aplícate calor local y ve a un fisioterapeuta que te haga un masaje y te descontracture la musculatura.
Pérdida del tapón mucoso
El tapón mucoso es el moco del cuello de la matriz y puede contener unos hilillos de sangre. Suele perderse cuando empieza la dilatación o después de un tacto vaginal en consulta. No siempre indica que el parto sea inminente. De hecho, si pierdes el tapón mucoso pero no tienes contracciones regulares ni dolor, no supone una urgencia.
Signos de alarma durante el tercer trimestre
Si tienes cualquier pregunta, hazla sin complejos durante las visitas médicas. Allí es donde debes resolver tus dudas, por muy obvias que te parezcan.
Ciertas situaciones requieren más urgencia en la visita:
- Sangrado: Si aparece sangrado durante el tercer trimestre es necesario realizar siempre una valoración médica en consulta o bien en urgencias. Puede ser que una exploración vaginal en consulta provoque un leve sangrado, pero para descartar cualquier anomalía ponte en contacto con nosotros.
- Dolor de cabeza, visión borrosa o dolor de estómago: Ante cualquiera de estos síntomas, lo primero que debes hacer es tomarte la tensión en casa o en la farmacia. Si la tensión está por encima de 14 (la máxima) o de 9 (la mínima) contacta con la consulta o, en caso de que la consulta esté cerrada, contacta con la comadrona o ve a urgencias.
- Disminución de los movimientos fetales: Al final del embarazo es normal que el feto se mueva menos, debido a la falta de espacio. Pero si en pocas horas o días los movimientos disminuyen de forma drástica, estírate del lado izquierdo y come algo dulce para ver si aumentan los movimientos del feto. De no ser así, contacta con la consulta, con la comadrona o ve a urgencias.
¿Cuándo ha empezado el parto?
Es muy difícil definir cuando ha empezado el parto ya que es un proceso que va evolucionando. Ante la duda de si estás o no de parto debes contactar con la consulta o bien llamar a la comadrona. Por norma general se indica que el parto se ha iniciado si se dan 3 circunstancias:
1. Que el cuello de la matriz se haya acortado
2. Que el cuello de la matriz haya dilatado
3. Que se tengan contracciones regulares.
Las contracciones son más fáciles de que tú misma las controles pero para saber el acortamiento y la dilatación del cuello de la matriz debemos hacer una exploración vaginal. Por ello en ocasiones te haremos venir al hospital aunque después sea una falsa alarma. Pero servirá para ver que todo evoluciona correctamente y estés más tranquila.
Ya ves que saber si estás o no de parto no es tan fácil como parece por lo que lo mejor es que nos contactes ante cualquier duda.
¿Cómo sé si he roto aguas?
La rotura de aguas es la salida de líquido amniótico por la vagina, bien porque la bolsa que las retiene en el útero se haya roto completamente o bien porque tenga algún pequeño poro por donde vaya saliendo este líquido. En el primer caso es más fácil ver que salen aguas sin control por la vagina, que suelen ser transparentes e inodoras, como agua del grifo. En otras ocasiones es más difícil verlo ya que las aguas no son tan abundantes y hay más dudas. Se puede poner una compresa y ver si se va empapando involuntariamente. Ante la duda debes contactar con la consulta o bien con la comadrona.
Si has roto aguas y no tienes contracciones ni dolores también debes contactarnos o bien acudir a urgencias ya que debe comprobarse que todo esté correcto y si hace falta administrar antibiótico.
Si el color de las aguas es transparente no hay prisa por acudir al hospital (siempre en un tiempo razonable de 1-2 horas) pero si las aguas son de color verdoso, amarillo o rojo debes acudir inmediatamente al hospital, siempre mejor previo contacto telefónico con nuestro equipo.
Te dejamos a mano los teléfonos de contacto:
- Consulta Quirón: 93 255 40 93
- Lucía (comadrona): 610 293 484
Lavados del periné:
Hay una serie de cuidados del periné que debes hacer aunque no lleves puntos y aunque haya sido un parto por cesárea:
• Dúchate diariamente. En caso de que el parto haya sido por cesárea puedes dejar que al agua y jabón caigan por la herida. Después debes secarla bien con una toalla a golpecitos suaves.
• Lava bien los genitales con agua y jabón, puedes poner gel íntimo como Epixelle®.
• Evita productos que puedan irritar la piel
• Sécate la herida con un secador con aire frío o bien con una toalla a toques para evitar estirar los hilos de los puntos o las grapas.
• Cuando vayas al baño a orinar límpiate con papel higiénico de delante hacia atrás. Después de defecar se recomienda lavar con agua y jabón íntimo y secar a golpecitos.
Compresas:
Los primeros días debes utilizar compresas de algodón y libres de plástico para que la zona transpire mejor. Se deben cambiar las compresas frecuentemente. Una vez hayan caído los puntos ya podrás utilizar las compresas habituales.
Debes evitar el uso de tampones y copa vaginal durante toda la cuarentena.
Ropa interior:
Se recomienda la ropa interior de algodón, evitando licra y encajes para que el periné transpire mejor.
Mitigar el dolor:
Si no eres alérgica, puedes tomar analgésicos para mitigar el dolor de los puntos y de la distensión del periné en el parto. Los medicamentos que te proponemos a continuación son seguros incluso durante la lactancia materna:
• Antiinflamatorios como Ibuprofeno de 600 mg o bien Voltarén de 50 mg cada 8 horas
• Paracetamol de hasta 1g/8h alternos con el antiinflamatorio (a las 4 horas de haber tomado el antiinflamatorio)
• Si tienes hemorroides puedes poner alguna crema para aliviarlas siempre vigilando que no se aplique directamente sobre la episiotomía.
• Puedes poner hielo envuelto en algún paño para bajar la inflamación tanto del periné como de las hemorroides. Puedes dejarlo unos 10 minutos, 3 veces al día.
Controles en consulta:
Recomendamos un control en consulta entre 1 y 2 semanas postparto. Si llevas puntos y son molestos podremos retirarlos. También te servirá para exponer todas tus dudas o temores, si lo necesitas, y podamos ayudarte. Después de esta visita te programaremos otra para las 6 semanas aproximadamente post parto, la cuarentena.
Pérdidas de sangre:
Las pérdidas de sangre que se producen por la vagina en el postparto se llaman loquios. Al principio son más rojos y parecidos a una regla pero después suelen disminuir en cantidad y cambiar de color. A los 10-15 días después del parto, las pérdidas pueden volver a ir en aumento durante unos días. Tienen un olor fuerte característico, que no debe asustarte, pero en caso de que el olor cambie a mucho más intenso o bien aparezca fiebre debes contactarnos.
En caso de hacer una lactancia artificial la primera regla suele venir al mes del parto y por tanto cuando los loquios ya son mucho menos abundantes.
Lactancia:
Si estás haciendo lactancia materna puedes tener fiebre los primeros días de la subida de leche de hasta 38 ºC. Paracetamol, en caso de que no haya contraindicación habitual para tomarlo, es un buen antitérmico para la fiebre durante la lactancia.
Las temidas grietas pueden ser muy dolorosas y puedes aplicarte pomadas de lanolina o bien ponerte algún aceite específico que ayudará a curarlas.
En caso de enrojecimiento del pecho, con fiebre y dolor al dar el pecho deberías contactarnos para descartar una mastitis. Hasta la visita puedes tomar paracetamol, ponerte calor local y masajear la zona para intentar vaciar bien el pecho.
Hay numerosos grupos de lactancia, tanto en los ambulatorios de zona como en el mismo Hospital Quirón que pueden ser de gran ayuda.
Cuarentena:
Hay una serie de recomendaciones básicas para los 40 días que dura la cuarentena:
• Evitar el uso de tampones y copa menstrual y sólo utilizar compresas para las pérdidas de sangre
• Evitar las relaciones sexuales durante toda la cuarentena por el riesgo de infección uterina
• Evitar los baños durante toda la cuarentena, tanto en bañera, como en piscina como en el mar para evitar posibles infecciones.
• Evita hacer deporte hasta pasada la cuarentena. Puedes caminar y hacer todo lo que no suponga grandes esfuerzos. No debes hacer abdominales hasta que hayas hecho recuperación de suelo pélvico.